Pleito. La firma del acuerdo por la hidroeléctrica Barro Blanco entre el Gobierno y las autoridades de la comarca Ngäbe-Buglé tiene divido al pueblo indígena.
Alba Pedrol, vicepresidenta del Congreso General de la Comarca, sostuvo que un grupo minúsculo de 20 personas (dirigidos por la cacica Silvia Carrera) tiene la zona revuelta por la firma.
Pedrol sostuvo que la división viene desde 2004 y que ahora quieren confundir al pueblo con un decreto N.° 537 de la Corte Suprema de Justicia, que deja sin efecto el Congreso que se ha previsto realizar el 15 y 16 de septiembre de este año.
Solicita la cancelación del proyecto de Barro Blanco, que no representa los intereses del pueblo.
Ausencio Palacios, diputado del circuito 12-1, mostró su descontento porque los diputados no fueron consultados y estuvieron en la mesa de la negociación.
Palacios pidió al presidente Juan Carlos Varela que haga una consulta para revisar el documento porque sus pobladores no creen en las autoridades comarcales, al señalar que Carrera no tiene credibilidad.
El diputado destacó que la población desconocía del acuerdo.
Esta firma también tiene enfrentados al Gobierno y la empresa Genisa, pues esta asegura que no se les tomó en cuenta en la firma del acuerdo y que se lesiona la seguridad jurídica.
Alvin Weeden señaló ayer en Telemetro que Genisa miente y quiere ‘pescar en río revuelto', pues lo que cabía en su contra era la expropiación.