La Policía Nacional Colombiana y la Agencia Anti-drogas Estadounidense (DEA) detuvieron este miércoles en Colombia al panameño-colombiano, Nidal A. Waked Hatum, considerado uno de los mayores responsables del lavado de dinero procedente del narcotráfico, informó la DEA en un comunicado.
Nidal Waked fue detenido con fines de extradición a Estados Unidos, donde debe enfrentar cargos por supuesto lavado de dinero y fraude bancario.
El Departamento del Tesoro de EE.UU acusó a la familia Waked de gestionar supuestamente una red mundial de narcotráfico y de blanqueo de capitales a través de un conglomerado de empresas que incluye a 68 compañías.
No obstante, el Grupo Wisa, a través de su presidente del grupo empresarial panameño, Abdul Waked, aseguró a través de un comunicado firmado por su puño y letra que colaborará con el Ministerio Público para aclarar esta lamentable confusión, que a su juicio son falsos e infundados.
Considero oportuno la decisión del Grupo Wisa de salir al paso y aclarar este nuevo escándalo que estremece al país, y a la vez debo reconocer la rapidez en este caso por parte de la Procuraduría de la Nación, que anunció su intención de iniciar inmediatamente una investigación para definir la responsabilidad de los panameños implicados por el Departamento del Tesoro de EE.UU, en blanqueo de capitales y narcotráfico.
Por lo que nos llama mucha la atención es que en el escándalo MOSSACK-FONSECA, la procuradora de la Nación demostró una especie de tortuguismo judicial, lo que nos da una percepción de una justicia selectiva, que le hace daño al país, mucho más, cuando uno de los implicados en este caso en mención era el consejero presidencial y miembro del partido gobernante. El país exige justicia caiga quien caiga.
Comunicador Social y Voluntario de los derechos Humanos
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En el caso MOSSACK-FONSECA, la procuradora de la Nación demostró una especie de tortuguismo judicial