SUEÑO. Otros tres peloteros dieron ayer el primer paso a una carrera profesional, al llegar a un acuerdo con dos organizaciones de las Grandes Ligas.
Se trata del lanzador de Panamá Oeste, José Amaya, quien después de escribir una buena historia en las categorías menores y juvenil en Panamá firmó con los Piratas de Pittsburgh.
Lo mismo le sucedió al jardinero Angel Manuel Basabe, un venezolano que tiene 10 años viviendo en Panamá y que también se fue con los Piratas.
Basabe, quien estudia en el colegio Pedro Pablo Sánchez de La Chorrera, obtuvo un bono de $450 mil.
Ambos peloteros eran manejados por Hermán Montero.
Ayer también estampó su firma en el contrato, el lanzador de Chiriquí Occidente Sadrac Franco con los Angelinos de Los Ángeles.