El aumento de la venta de licor, borracheras constantes y actos bochornosos se han convertido en la tónica en Las Lajas de Tolé, provincia de Chiriquí.
La situación tiene alarmada a la comunidad, y es por ello que el abogado Maximino Mejía decidió presentar una denuncia ante el gobernador de la provincia.
‘Venden desenfrenadamente cerveza y aguardiente, y es común ver sujetos embriagados paseándose en la vía pública, a pesar de que es una falta sancionada', reclamó.
El vicio del licor ha destruido hogares en la comunidad.
Las riñas y escenas son algo común.
Según el letrado, esta situación desencadena en escándalos familiares y un mal ejemplo para la juventud. ‘Algunos de esos sujetos hasta les roban a los vecinos para pagarse sus vicios', denunció.
María Sanjur, una residente de este distrito, solicitó a las autoridades realizar rondas policiales para detectar a quienes no cumplen con la ley y sancionarlos.
Eliécer Castrellón, alcalde de Tolé, tras conocer la denuncia aseguró que hasta la fecha no han recibido ninguna queja formal por supuesta venta clandestina de licor.
‘Iniciaremos las investigaciones en las tres comunidades que comprenden el corregimiento, para confirmar si se está realizando esta práctica y evaluar posteriormente lo que estable la ley para parrilladas y locales de expendio de bebidas alcohólicas', explicó.
Por su parte, el gobernador de Chiriquí, Hugo Mendéz, aclaró que le corresponde al municipio atender dicha queja; de lo contrario, se debe presentar ante la Procuraduría de la Administración.